Círtrica

Hacemos espectáculos con aguja e hilo, hacemos espectáculos con mucho cariño. Pretendemos desarrollar el circo como técnica artística pero también como herramienta de comunicación y provocación.

Nuestra forma de trabajar, es buscar valores, experiencias, pequeñas verdades de nuestro alrededor en los que mediante una unión de artes escénicas, podamos trasladar a escena, calle o jardín, un poquito de nosotros, de lo que hemos y vamos aprendiendo.

La Círtrica es igual a Ana Rebenaque, formada como acróbata en la Escuela de Circo Rogelio Rivel, entre otros centros circenses internacionales. En el 2013 crea la pieza La mujer voladora, sentando las bases de una forma de trabajar a la búsqueda de pequeñas verdades cotidianas, de aquellas experiencias y valores que le rodean, para poder fusionarlos con la artes escénicas. Además, Rebenaque se interesa, especialmente, por la comunicación de dichos valores a través de la docencia, para conseguir un diálogo educativo y moral que le identifique. Una necesidad vital que entronca con su infancia orientada al atletismo y a las artes marciales. Un loable objetivo que le ha llevado a ser profesora de trapecio en la Asociación Valenciana de Circo.